Del 23 al 25 de octubre, desde Castel Gandolfo, EcoOne propone un encuentro para examinar el impacto de la carta encíclica “Laudato Sí” en el mundo contemporáneo y los nuevos caminos hacia una ecología integral. Un encuentro, para resaltar el papel que individuos y organizaciones sociales pueden desempeñar en el cuidado de nuestra Casa Común. 

Conversamos con el profesor Luca Fiorani, físico y coordinador de la iniciativa interdisciplinaria EcoOne, mientras viajaba por el centro de Italia. Queremos hacerle algunas preguntas sobre el encuentro “New ways towards integral ecology: five years after Laudato Si’” (Nuevos caminos hacia una ecología integral, a cinco años de la Lauda sí), organizado por EcoOne, que se llevará a cabo en Castel Gandolfo, Italia, del 23 al 25 de octubre. El programa prevé intervenciones, presentaciones (orales o póster), mesas redondas, talleres temáticos y sesiones plenarias en diálogo con los expositores, tanto en directo como online.

Prof. Fiorani, ¿Cómo surgió la idea de este encuentro?

La idea nació incluso antes de que el Papa Francisco estableciera un año especial de reflexión sobre la carta encíclica “Laudato si”, entre el 24 de mayo del 2020 y el 24 de mayo del 2021. Porque a nosotros, en EcoOne, -una iniciativa cultural e interdisciplinaria que desde 1998 evidencia el concepto de relacionalidad en la naturaleza y la presencia de Dios debajo de todas las cosas- era esencial reflexionar sobre este documente que entre sus ejes de apoyo tiene precisamente estos dos conceptos: la relacionalidad en la naturaleza y no sólo, el “todo en relación”, tan querido para el Papa Francisco, y la presencia de Dios bajo las cosas, pero que hay que entenderla bien: no se trata de un panteísmo si no, como siempre lo han dicho los Padres de la Iglesia, los místicos y los teólogos que, de alguna manera, Dios está presente en la Creación y en sus criaturas.

¿Cuál es el objetivo?

El de hacer un balance de Laudato si y también el deseo de abrir nuevos caminos, más allá de Laudato sí. No porque esté desactualizado sino para poder implementar su pensamiento: el desarrollo cultural y su significado práctico. De hecho, la última sesión está dedicada a las “buenas prácticas” en el ámbito educativo, ecológico, ambiental, etc.

¿Es un encuentro para expertos o también para simples entusiastas?

Cualquier presentación podría no ser facilísima de seguir para los no expertos. Pero, algunas de las sesiones son realmente formativas. Por ejemplo, la más económica, es más bien didáctica. Ecología y economía están íntimamente unidas, ya en su etimología: sin una revolución, un cambio radical de nuestro paradigma económico-financiero, no se puede ser respetuosos del cuidado de la Casa Común. Así, habrá intervenciones dedicadas al desarrollo sostenible, a la economía circular, al decrecimiento feliz y luego, la apertura hacia nuevos caminos posibles de entender la economía, aprovechando el riquísimo bagaje cultural de Chiara Lubich.

En una de las sesiones, involucraron personas con orígenes religiosos distintos ¿Por qué hicieron esta elección?

Desde la perspectiva de la fraternidad universal de la que habla el Papa Francisco en esta nueva encíclica “Fratelli tutti”, no es una novedad que en la Iglesia que se busque una alianza con los que tienen fe, en el cuidado de la casa común. También nosotros juntos tratamos de hacer un balance de la contribución de aquellos que confían en la fe, para trabajar por el bien común del Planeta.

En Laudato si, el Papa Francisco hace todo un discurso sobre el peligro del paradigma tecnocrático. Ustedes incluyen en el encuentro una sesión que se titula “Will Science and Technology Save the World?” (¿La ciencia y la tecnología salvarán al mundo?) ¿No es esto una contradicción?

Es una provocación deliberada. Se da a entender que la respuesta que pensamos es “no”. Creemos que la ciencia y la tecnología por sí solas no salvarán al mundo. Nos parece intuir, leer una respuesta en las cosas: necesitamos un cambio de paradigma del sistema de desarrollo, necesitamos otra forma de concebir la vida y la economía. En resumen, si continuamos a entender la economía como un crecimiento ilimitado, un proceso material ilimitado -este espejismo- la ciencia y la tecnología no serán suficientes para hacer respetar el planeta. No es que nosotros, con las energías renovables, con la eficiencia energética, con la hidroelectricidad, la energía solar fotovoltaica, podemos salvar al mundo: no, no lo lograremos. Esta es la conclusión a la que muchos de nosotros hemos llegado y queremos reflexionar sobre ello.

Para mayores informaciones sobre el encuentro, clicar QUI.

¿Qué es EcoOne?

EcoOne es una iniciativa cultural internacional que nació en 1998, inspirada por Chiara Lubich, fundadora de los Focolares, y por Sergio Rondinara, estudioso de epistemología. EcoOne está promovida por una red de docentes, académicos, investigadores y profesionales que trabajan en ciencias ambientales. Se esfuerzan en enriquecer su conocimiento científico con una profunda lectura humanista de los problemas ecológicos contemporáneos.

Junto a otras organizaciones asociadas, que persiguen el objetivo del destino universal de los bienes y de una más estrecha interdependencia entre los países, EcoOne intenta introducir y promover tales principios en las ciencias ambientales. Se esfuerzan por enriquecer sus principios en las cuestiones ambientales a nivel social, político y económico.

Imagen de RÜŞTÜ BOZKUŞ en Pixabay.