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Run4unity 2023: relazioni di pace e iniziative ecologiche
Run4unity 2023 es la genialidad de una carrera que comenzó el 7 de mayo, pero dura todo el año
Ha pasado poco más de un mes, pero el entusiasmo no decae. Seguimos “corriendo” en el mundo, después del Run4unity: diferentes caminos, diferentes tiempos, pero la experiencia del pasado 7 de mayo está dando ritmo a la vida de las comunidades que en el mundo se han comprometido en esta cita estando en primera línea, compuesta principalmente de niños y jóvenes, pero no solo.
Sí, lo sé, estoy haciendo un poco de confusión, pero ahora iré con orden.
“Es hora de correr todos juntos” es uno de los lemas que acompañaron este año la carrera por la paz y la solidaridad climática “Run4unity” una iniciativa ingeniosa a su manera, porque está concebida por niños, jóvenes, comunidades, que corren a la misma hora según los distintos husos horarios, creando una especie de carrera de relevos a nivel mundial: desde las Islas Fiji hasta Canadá, hubo un verdadero mundo que realmente se puso en marcha el 7 de mayo, día elegido porque se clausuraba la Semana Mundo Unido. Lo interesante no es solo esa globalidad que le da cierto atractivo al evento, sino también el sentido que se le da a una carrera concebida de esta manera: testimoniar, juntos que la opción de la fraternidad siempre es posible, que son muchos en el mundo los que creen, que valores como paz, solidaridad, fraternidad son valores concretos, proféticos por los cuales vale la pena gastarse y “correr” en la vida, porque la cotidianidad, que luego toma forma entre un evento y otro, muestra que esta relacionalidad hace la vida mejor, ayuda a superar las dificultades, transforma creativamente un posible conflicto, en cualquier nivel, en una oportunidad de diálogo, etc.
Así lo demuestran las historias y números de la edición de este año: empecemos por esta última Run4unity 2023 que involucró los 5 continente, 63 países del mundo, 181 eventos con miles de participantes, más de 7194 kilómetros recorridos, 12.445 minutos de ejercicio físico, 2676 árboles plantados y… los números aún se están actualizando.
¿Árboles plantados? Sí, porque este año la carrera, en cada grupo, ha tomado un sentido ecológico: una conciencia hacia una conversión de nuestras comunidades por el cuidado del medio ambiente y de las personas, conscientes de que donde hay cuidado, hay paz: tanto es así que Run4unity, donde fue posible, se llevó a cabo en lugares significativos para la paz, al límite entre países o comunidades en conflicto, o en lugares ecológicamente significativos, con el apoyo de la plataforma de iniciativas Laudato Sí o del Dicasterio para el Desarrollo Humano Integral.
Por tanto, los participantes buscaron micro patrocinadores para transformar los kilómetros recorridos en árboles plantados, en colaboración con Organizaciones locales e internacionales, también para poderlos cuidar a lo largo el tiempo.
Y las historias son las más variadas, una más bonita que la otra: si vamos a Japón, por ejemplo, Run4unity se organizó por primera vez junto con el Centro Comunitario Hibakusha, una organización que agrupa a los supervivientes de la bomba atómica de Nagasaki, que hoy promueven actividades por la paz. Las campanas del Parque de la Paz suenan a las 11:02, hora del lanzamiento de la bomba en 1945, invitando a los turistas que se encuentran en ese momento a tocarla con los presentes. Así comenzó la carrera, descubriendo algunas estatuas de la paz donadas por varios países, recorriendo varios kilómetros, pero dejando algunos momentos para escuchar los testimonios de los sobrevivientes.
Si después vamos a India, encontramos a Adiba Ali, 18 años, musulmana de Nueva Deli que cuenta: «El evento fue organizado este año en colaboración con Teens4Unity y PRATYeK (una ONG para niños). Éramos alrededor de 50 participantes. Caminé casi 5 km para recoger fondos para sembrar árboles. Con los fondos recolectados podremos sembrar alrededor de 60 árboles, lo cual es muy importante para mí y para mi comunidad, porque vivimos en este planeta y tenemos deberes y responsabilidades que cumplir con la tierra y la naturaleza. Este planeta nos está dando mucho y nosotros también debemos hacer algo a cambio por planeta, por nuestra madre Tierra».
En Bello Horizonte, Brasil, jóvenes y comunidades cuentan cómo Run4unity fue una oportunidad para conocer a COMUPRA -Consejo Comunitario Unido del Ribeiro de Abreu- y su proyecto “Que Onça beba agua limpia”, el objetivo es la completa limpieza de las aguas del Ribeirão do Onça. Nadar, pescar y jugar en Onça para 2025 es el objetivo. Para ello, junto con otras asociaciones, los chicos han trabajado logrando trasladar a 830 familias de la ribera del río, zona de continuas inundaciones, a zonas seguras, pidiendo un tratamiento adecuado de las aguas residuales de toda la cuenca del río, para luego realizar proyectos de jardines comunitarios, cursos y una biblioteca comunitaria. Correr, en Bello Horizonte, sirvió entonces para sensibilizar a todos sobre estos temas y sobre las necesidades de los más vulnerables.
Y podríamos seguir, porque quien corre en Run4unity no solo corre un día, sino que se quedan en la carrera durante todo el año.