El Genfest, el festival de la juventud ha cobrado vida en Calabria. Numerosas intervenciones de expertos, alrededor de 400 jóvenes de toda Italia, en particular del centro sur de la península, actividades de voluntariado y una conmemoración significativa en la playa de Cutro, donde en febrero de 2023 perdieron la vida 94 migrantes.

Comenzó en Lamezia Terme, en el auditorio del “S. Benedetto”, el Genfest 2024 Calabria que, en la edición “local” italiana del encuentro internacional de la parte juvenil del Movimiento de los Focolares que se realizó en Aparecida (Brasil) estos últimos días, eligió Calabria como punto de encuentro de los jóvenes provenientes de todo el Sur y de las Islas. Son cerca 400 jóvenes de Calabria, Sicilia, Basilicata, Apulia, Cerdeña y Campania y de otras partes de Italia, con representantes procedentes de otros países europeos y de Medio Oriente. Una fiesta de miradas, encuentros, música y colores es la inauguración de los tres días en los que centenares de jóvenes reflexionarán, se interrogarán y “ensuciarán las manos”, un desafío urgente en una sociedad y un mundo aparentemente interconectado por relaciones “virtuales” que a menudo dan lugar a soledades “reales” e individualismos.

Cuidar como respuesta a la cuestión de relación con el otro que alberga cada corazón humano, aquel corazón “de cada joven” en el que -ha dicho el obispo de Lamezia Terme, Monseñor Serafino Parisi– está la imaginación, el deseo de un mundo mejor. Una imaginación que no puede permanecer como tal, sino que debe transformarse en un desafío a asumir: el de convertirse en protagonistas del cambio. Les deseo que un día, mirando su pasado, puedan descubrir que lo bueno que se ha logrado construir tiene también su firma”. Recordando los orígenes del Movimiento de los Focolares y la figura de Chiara Lubich, el presidente de la Conferencia Episcopal de Calabria, Mons. Fortunato Morrone, instó a los jóvenes a desarrollar sus potencialidades, llevando adelante la omnipotencia del amor que Chiara Lubich ha intuido. “Gracias por este río de felicidad que deseo que hagan fluir en todas partes del mundo”, dijo el alcalde de Lamezia Terme, Paolo Mascaro dando la bienvenida a los presentes en la ciudad, reiterando que “Lamezia está orgullosa de ser motor de una ‘iniciativa que dejará rastro y huella en nuestra tierra que recordaremos para siempre”.

También subieron al palco los chicos de la asociación “Lucky Friends”, que compartieron a través de un video la historia de sus actividades en la zona desde hace más de diez años.  Durante la mañana, se escucharon los testimonios de algunos exponentes del Movimiento, procedentes de diversas regiones italianas, que compartieron brevemente con los jóvenes sus experiencias en las distintas ediciones del Genfest que se desarrollan desde 1980. Una historia que quiso devolver a los jóvenes de hoy, el sabor y las emociones de la preparación, de la espera, sobre todo el valor del encuentro entre diferentes perspectivas que se convierten en riqueza para llevar consigo para toda la vida.

El tema de la relación con el otro estuvo al centro del debate que concluyó la primera parte de la jornada con Valentina Guadiano, vicerrectora del Instituto Universitario Sophia y docente de Antropología filosófica, que en la conversación con los dos jóvenes anfitriones de la mañana, Mattia Paradiso y Francesca Porcelluzzi, evidenció el valor de la relación como “elemento constitutivo de nuestro yo. Ninguno de nosotros se ha dado un nombre solo, ninguno nació si una relación: esto nos dice que cada uno de nosotros es único e irrepetible, en un vínculo de dependencia con los demás”.

El primer día continuó con una visita de los jóvenes a algunas asociaciones y comunidades del territorio que trabajan por la recuperación de personas con adicciones, por la acogida de migrantes y menores extranjeros no acompañados, por iniciativas ecológicas, para concluir después con la visita al plátano secular de Curinga.

El segundo día, a las 11.30 en el auditorio Santuario “Madonna Greca” de la Isla Capo Rizzuto el saludo de Mons. Francesco Savino, obispo de Cassano allo Jonio, vicepresidente de la Conferencia Episcopal Italiana para Italia Meridional, seguido del debate con Pasquale Ferrara (Embajador) y Maria Giovanna Pietropaolo (Asociada de Relaciones Exteriores del ACNUR, ONU). A las 15 “Solo andata”: Estudio libremente inspirado en “Solo andata” de Erri De Luca, a cargo de Davide Fasano -Academia y Escuela de Teatro “Fughe Organizzate”. A las 16 La Santa Misa seguida por dos talleres, de 20:30 a 23, y en la playa de Steccato de Cutro, el “espectáculo participativo” para recordar la tragedia de febrero 2023: “Silencio, escucha, palabra: nuestra oración por la paz”.

Segundo día del Genfest 2024 en el auditorio del santuario “Madonna Greca” de la Isla Capo Rizzuto. Los 400 jóvenes recorrieron alrededor de 90 kilómetros para vivir la segunda jornada del Genfest dedicada a un urgente tema: “Cuidemos la paz” -tan a riesgo hoy en el mundo- y la situación de los países ribereños al Mediterráneo. Los jóvenes provienen de Calabria, Campania, Basílica, Apulia, Sicilia, Cerdeña, Albania, con representantes también de otras regiones, de Palestina y Egipto.

El saludo de bienvenida lo hizo Mons. Francesco Savino invitando a los jóvenes a responder hoy a la llamada de Dios a reparar “la casa del mundo”.

Hablando del Mediterráneo, lugar donde han muerto decenas de miles de personas, dijo: “Volvamos todos a ser humanos. Hoy hay demasiada deshumanización. Un cristiano que no se hace humano niega a Jesucristo”. De aquí el llamado a la paz, por la que todos debemos luchar, con un primer nivel de compromiso, que involucre a todos. Esto es lo que nos concierne a todos nosotros, llamados a ser artesanos de la paz”.

La segunda parte de la mañana contó con la presencia de Pasquale Ferrara, director general para asuntos políticos y de seguridad del Ministerio de Asuntos Exteriores, ex embajador de Argelia. Pasquale Ferrara, en diálogo con los jóvenes, habló de los numerosos conflictos que hay en el mundo, trazando un panorama de 360 grados de las causas que generan las guerras. “Se suele decir que las guerras son provocadas por razones de realismo para defenderse de los ataques, para defender a los pueblos, para garantizar la seguridad. Pero después de cada guerra, en realidad somos aún más inseguros y no se resuelve ningún problema”. Recordó una frase muy usada: “Si quieres la paz, prepárate para la guerra”. Pero la verdad -añadió- es que si se prepara la guerra, la guerra llegará tarde o temprano. Y eso es lo que demuestran los numerosos conflictos que hoy azotan al mundo”.

Y hablando de los migrantes reveló como el fenómeno actual es el resultado de los grandes conflictos que existen hoy en el mundo. La falta de prospectivas, la imposibilidad de programar el propio futuro está a la base de muchas migraciones. Recordando la propia experiencia como embajador, habló de Argelia, un país donde las condiciones de vida no son las peores (universidad gratuita, libros gratuitos, residencias universitarias gratuitas para quienes están fuera de casa) pero lo mismo, muchos jóvenes dejan el país porque buscan una mejor condición para su futuro. Si en algunos países se construyen “muros”, en Europa hay un “muro invisible” que se llama Schengen, que limita la movilidad humana. Se les define como invasores. La historia de la humanidad está hecha desde siempre de migraciones, de pueblos que se encuentran y se mezclan.  Las migraciones no son un hecho patológico, sino un hecho fisiológico. Sería necesario tener una perspectiva de amplio alcance. En el planeta “tierra” no hay clandestinos, legítimamente todos somo ciudadanos de esta tierra. En todo caso, hay “irregulares”. Los migrantes -según Ferrara- aunque no sean perseguidos, son fruto de los grandes conflictos de la humanidad. Nos interpelan sobre nuestra forma de pensar y gestionar el Estado. Necesitamos una “política planetaria”, capaz de mirar no sólo el bienestar de los Estados individuales, sino también el bienestar de la humanidad entera. Los representantes políticos no representan sólo los electores, sino a todos lo seres vivos (animales, plantas, equilibrios ambientales) que sirven para recordarnos cómo gestionar el Estado. El “Planeta Tierra” es el hogar común de la vida.

“Las guerras -concluyó- destruyen la vida, son asesinatos a gran escala, pero también son ECOCIDIO. Preservar la vida humana y la vida del planeta es un gran desafío para la humanidad hoy”.

Por la tarde, espectáculo teatral “Solo Andata”: un flashmob (coreografía relámpago) titulado «Silencio, escucha, palabra: nuestra oración por la paz».

El culmen de la jornada en Steccato di Cutro, en las playas que dominan Piazzale Africa, donde el 23 de febrero de 2023 se produjo un naufragio en el que murieron 94 personas, además de un número indefinido de desaparecidos. Entre los muertos había hombres, mujeres y niños.

Los jóvenes que participaron al Genfest quisieron honrar la memoria de los migrantes. Un grupo de artistas italianos, libaneses y jordanos crearon un marco performativo para dar un rostro a todas las vidas que han dejado de brillar, para traer su chispa de eternidad entre nosotros. Las voces y los gestos permitieron reconstruir y narrar sus historias. Sus historias surgieron del mar -simbólicamente de un barco cuyas luces se apagaban al acercarse a la orilla- para recordar y conjurar que esto no vuelva a suceder nunca más.

La “performance participativa” fue organizada por Rita Amidi (textos de la historia), Marta Carino (dirección video), Alessandra Cassone (voces de las historias), Eleonora Guarracino (vestuario), Angela Iantosca (narradora escénica), Fernando Muraca (concepto y dirección), Riccardo Pierà (diseño de iluminación), Maria Salvatori (violonchelo), Apo Yaghmourian (escenografía y codirección).

El alcalde de Cutro, Antonio Cerasa, presentó la velada y agradeció a los jóvenes del Genfest que acudieran a honrar la memoria de los migrantes y recordar una tragedia que impactó fuertemente en la vida del pueblo de Cutro. Recordó que los calabreses, los ciudadanos de Cutro, también eran migrantes. “Pero a diferencia de entonces, ellos parten sabiendo que tal vez no lleguen. Hay que salvar a estas personas, dejar las otras dinámicas a los demás”. Recordó la capacidad de acogida de la comunidad de Cutro, capaz no solo de ofrecer un techo, sino de abrir corazones. Y agregó: “Verlos aquí jóvenes hoy, llena el corazón de alegría. Nunca hubiera imaginado un evento como este”. Y concluyó recordando el mensaje de fin de año del presidente Sergio Mattarella, quien -citando la tragedia de febrero 2023- dijo: “Los valores que la Constitución pone como base de la convivencia se encontraron en la piedad serena de la gente de Cutro”.

Valores que los jóvenes del Genfest han compartido e inmortalizado y que, a través de ellos, llegarán a sus países de origen.

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