¿Es posible construir la paz delante de un café? Coffee With Peacemakers es un grupo internacional de jóvenes que ofrece un espacio para dialogar de forma espontánea y casual, con un objetivo: confrontarse, inspirar y tener un impacto positivo sobre otros jóvenes que quieren ser #constructoresdepaz.

“Todo comenzó por casualidad, a partir de una llamada entre amigos”. Así comienza a narrar Laxman, uno de los fundadores de Coffe With Peacemkers.  Se trata de un proyecto que involucra a muchos jóvenes de todo el mundo, que tienen en común el deseo de contar sus propias historias a través de varios canales: Instagram, Facebook, Youtube. ¿El tema? Construir fragmentos de paz en la propia cotidianidad ¿y el objetivo? Crear una red de constructores de paz que puedan influir positivamente en la vida de muchos otros jóvenes.

¿Cómo y por qué nació el proyecto?

La idea del proyecto nació durante los primeros cierres ocasionados por la pandemia. Cuenta Laxman: “Nos encontrábamos solos y aislados, cada uno en la propia casa. Un día tenía en programa una llamada con Azeez, un amigo iraní que conocí en un evento internacional organizado por el Movimiento de los Focolares. El mismo día recibí una llamada de una amiga que vive en Uganda. No quería renunciar a ninguna de las dos: entonces les propuse a los dos hacer una llamada juntos. Y así, por casualidad, comenzamos a hablar de nosotros mimos, de nuestros desafíos cotidianos, teniendo un impacto positivo el uno en el otro. Nos pareció entonces una buena idea la de crear oportunidades semejantes también para otros muchachos. Definimos que la paz podía ser el tema de fondo sobre el cual centrar nuestras charlas”.

Azeez dice: “En mi vida he conocido muchas personas que tienen bellas historias, y había estado pensando durante mucho tiempo cómo encontrar un modo de recopilarlas, de contarlas. No tenía idea que al final esta pudiera ser la forma de hacerlo. Nació de manera espontánea, gracias al podernos confrontar con Laxman…”.

¿Qué hace hoy Coffe with Peace Makers?

También hoy los muchachos no quieren seguir un guion preciso. Simplemente quieren ser un canal para crear relaciones y diálogos verdaderos, positivos. Los valores a los que no quieren renunciar son la espontaneidad, la autenticidad. En este momento los Pacemakers han decidido aprovechar la posibilidad Live en Instagram, Facebook y YouTube, para crear charlas (delante de un buen café) en las que cada uno se sienta libre de contar su propia historia, creando un espacio de diálogo sincero. Inicialmente los contenidos eran prevalentemente en inglés; desde cuando aumentaron considerablemente los seguidores provenientes de países de lengua árabe, han creado varios contenidos en este idioma. Uno de ellos agregó: “Nuestro objetivo sigue siendo el de transmitir positividad, de tal modo que quien escuche pueda seguir el ejemplo de las experiencias contadas y dar positividad también a su propia vida”.

¿Cuáles son las principales dificultades?

“La principal dificultad seguramente es el huso horario”. Lo explica Ivee, una joven australiana, residente en Melbourne. En el equipo que trabaja en la creación de contenidos hay 6 muchachos provenientes de Nepal, Iraq, Colombia, Egipto, Australia e India, cada uno con ritmos y estilos de vida distintos. Prosigue Ivee: “Es muy bello ver el esfuerzo que hace cada uno para tratar de estar presente en las reuniones. Cada uno hace sacrificios no por motivos de dinero -no nos pagan por lo que hacemos- sino porque creemos en la belleza y la utilidad que tiene este proyecto para nosotros y para quien entra en contacto con las historias que contamos”.

¿Cuál es el secreto para seguir adelante?

“Tener paciencia. Continuar a pesar de las dificultades”. Responde Laxman. Y Azeez agrega: “Aun si a veces es desalentador ver contenidos de bajo nivel que tienen más éxito que los propios, tenemos confianza que nuestros contenidos pueden marcar la diferencia para quien los ve. Y si el esfuerzo sirviera incluso para que una sola persona decida cambiar para mejorar algo de su vida, gracias a nosotros, entonces estamos felices”.

¿Hay nuevas ideas en trámite para el proyecto?

La respuesta de los muchachos es sí: involucrar generaciones más jóvenes. Todavía no hay nada definido en detalle, pero la idea es la de mostrar acciones de paz que tengan que ver con los niños. Explica Azeez: “Laxman y yo hemos tenido una infancia difícil. Nuestro sueño es que esto no suceda a las próximas generaciones. Entonces nos parece importantísimo hacer nuestra parte para sensibilizar a los jóvenes con respecto a la paz y a la educación a la paz: tal vez, gracias también a nuestra pequeña ayuda, los niños de mañana podrán crecer en contextos mejores de aquellos en los que hemos vivido”. Entonces la invitación final de los Peacemakers es: “No dejes nunca de soñar, y continua a construir tu sueño cada día. El objetivo es sobre todo continuar a hacer, como podemos, la propia parte. Casi sin darnos cuenta esto hará la diferencia: todo parte de ahí, continuar. “Este es el fin de estos Peacemakers que, dialogando delante de una taza de café, se comprometen a construir fragmentos de paz.