Por Lucia Capuzzi

El 24 de septiembre de 2022, el Papa Francisco viajó a Asís para encontrarse con los jóvenes economistas, emprendedores y agentes de cambio de Economy of Francesco procedentes de más de 100 países del mundo para la tercera edición del evento, el primero presencial.

Paz, cuidado, servicio, protección, amistad, alianza, reconocimiento, dignidad, compartir, felicidad. Estas son las diez palabras de la economía de la vida que los jóvenes economistas, emprendedores, agentes de cambio han decidido encarnar en la realidad, por invitación del Papa Francisco.

No es una utopía “porque ya la estamos construyendo”, concluye el “Pacto” firmado el 24 de septiembre pasado en el teatro Lirick de Asís por la joven de catorce años Lillly Ralyn Satidtanasarn, a nombre de todos los participantes de The Economy of Francesco (EdF), y del mismo Papa Francisco. Una adolescente tailandesa y el obispo de Roma son los guardianes de este “vaso del futuro”. Un ánfora de papel y tinta en la que los chicos y las chicas han reunido sus compromisos personales, nacidos y madurados en tres años de sesiones de trabajo online.

“Junto al texto del Pacto, lo entregaremos a la tierra como raíces de la economía del mañana, en la rosaleda de la Porciúncula, de donde partieron los hijos de Francisco para el mundo”, dijo Lourdes, una de las tres presentadoras que se alternaron en el palco, en el que había alrededor de treinta coetáneos, entre los cuales los ocho testimonios. Soñadores, pero con los pies bien plantados en el suelo, capaces de revolucionar el mundo con “el amor, con ingenio y con las manos”.

Como Facundo Pascutto, argentino de Lomas de Zamora, enorme ciudad satélite de Buenos Aires que, junto a la facultad de Ciencias Sociales, transforma juntas de vecinos, sindicatos, universidades, cooperativas, comedores comunitarios, unidades penitenciarias y empresas en “pequeñas Asís”, es decir espacios de encuentro entre los distintos actores sociales.

O Henry Totin de Benín, quien con la asociación Javev, hizo de una maleza -el jacinto de agua o togblé- un recurso económico para los agricultores del valle de Ouémé. O Maryam, activista de los derechos de la mujer, que huyó de Afganistán de los talibanes precisamente gracias a la red de contactos puesta en marcha por The Economy of Francesco.

Es imposible resumir el caleidoscopio de historias sobre los cuales se apoyan los doce puntos del Pacto. Algunas muy nuevas, como la “Fattoria de Francesco” (Hacienda de Francisco), inventada por Mateusz Ciasnocha, campesino de Polonia del norte que, en el transcurso del trayecto iniciado por el Papa, encontró la forma de conjugar agricultura con justicia. “¿Cómo? Respetando los campos y quienes los trabajan. Ahora hemos creado una nueva empresa en Nigeria para apoyar la producción familiar de cinco aldeas de la zona de Ibadan”, explicó. Otras en cambio son antiguas. La comunidad de Paz de san José de Apartadó tiene veinticinco años. “Fue fundada el 23 de marzo de 1997 cuando nadie hablaba de economía circular ni cultivos sostenibles. Tampoco nosotros sabíamos mucho al respecto. Todo sucedió por ‘chiripas’”.

José Roviro repitió varias veces esa palabra que quiere decir “fortuna” o “providencia”, explica. Constituido por un grupo de campesinos desplazados a causa del conflicto colombiano, la comunidad eligió decir no a la violencia. “porque la hemos experimentado en nuestra piel -agregó Sayda Arteaga-, decidimos no condenar a los demás”.

Otra iniciativa -apoyada por Operación Colomba- produce alimentos sostenibles gracias a un sistema de trabajo común. Después desde del modelo pionero, salieron otros caminos. “La recién nacida Fundación Rut iniciará el proceso de escucha desde la Comunidad para desarrollar una gran plataforma digital (Inter Zona) sobre la violación de los derechos humanos y las formas de resistencia no violenta”, subrayaron Annamaria De Paola y Giovanna Martelli.

Pequeños y grandes ejemplos de otra economía posible en la que creen los jóvenes de EoF y, algunos de ellos, “en mañanas particularmente luminosas, han vislumbrado el comienzo de la tierra prometida”. ¿Cuánto se requiere para alcanzarla? Demasiado, argumentan los escépticos, a menudo no del todo desinteresados. A la gente de EoF no le importa y ahora continuará su camino con la apertura de The Economy of Francesco 2.0. En esto son proféticos: viven en la noche, como el centinela del pasaje de Isaías. No tienen respuestas para los transeúntes angustiados que preguntan cuánto falta para que salga el sol, pero los escuchan. Son mujeres y hombres de diálogo nocturno. Porque –resonaba con fuerza ayer desde el escenario de Asís- “no hay amanecer más hermoso que el que nos sorprende en compañía de los profetas”.

Fonte: Diocesi AssisiFuente: https://www.avvenire.it/papa/pagine/papa-francesco-ad-assisi

LEE EL TEXTO COMPLETO DEL PACTO: https://francescoeconomy.org/it/il-patto-per-leconomia-di-papa-francesco-con-i-giovani-2/