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“Hijos e Hijas”: el compromiso del artista Luvol por los derechos de los niños

 
17 marzo 2023   |   , ,
 
Federico Luvol

Ha viajado a Medio Oriente para contar los que viven los niños de aquellas tierras martirizadas y contribuir con su arte a difundir el bien y la paz: Sons & Daughters, el proyecto nacido de la colaboración con la asociación Ohana.

«Durante el conflicto sirio me impactó mucho ver la imagen de dos hermanitas sirias después de un ataque químico. Entonces, quise retratar esas tomas horribles, donde vi misericordia y amor sin límites al mismo tiempo», dice Luvol, nombre artístico del artista italiano de plantillas fotográficas, Federico Vullo.

Autodidacta, nacido en 1991, se apasionó por el “stencil art” al observar las técnicas de artistas de talla internacional. ¿Qué es el “arte de la plantilla”? es la creación de grafitis o murales mediante un “stencil”, es decir una máscara, que permite su reproductividad.

Entre los temas preferidos por Luvol está la autenticidad de los niños en el juego, a través de imágenes que comunican su inocencia y alegría. Crea sus obras sobre diferentes superficies, pero sus favoritas son las propias del contexto urbano, como las señales de tráfico en desuso u otras superficies olvidadas y oxidadas. Luvol lo hace por pasión, y esta pasión, que va más del arte mismo, toca a la humanidad muchas veces olvidada en contextos difíciles.

Recientemente ha iniciado un proyecto, en colaboración con la asociación de voluntarios Ohana, titulado «Sons & Daughters» (Hijos e Hijas) que tiene como objetivo recorrer la llamada “Ruta de los Balcanes” para denunciar el estado de familias enteras, y sobre todo de los niños en los trayectos para llegar a Europa. Luvol, a través de su arte, quiere poner al centro de la atención mediática a estos niños refugiados que, obligados a huir de países como Siria, Irak y Afganistán, se encuentran viviendo otros infiernos en forma de muros, alambradas, hambre, heladas, abusos.

Todo comenzó “por casualidad”, en 2021, cuando la Comunidad de San Egidio se puso en contacto con él, a través de un mensaje de Facebook, para dar un curso de plantilla a unos menores no acompañados. El curso nunca comenzó. Pero al conocerlos, Luvol también se enteró de que había un jardín de infantes para niños en Alepo, vinculado a la comunidad de los Focolares. Inmediatamente se puso en contacto con ellos, primero les pidió fotos para hacer stencils y luego, intrigado por el trabajo que hacían, compró un boleto para Beirut y llegó a Siria por tierra.

La pasión de Luvol lo llevó a cruzar el Mediterráneo y aterrizar en Oriente Medio, donde tuvo la oportunidad de conocer varios proyectos relacionados con el Movimiento de los Focolares y visitar varios campos de refugiados. Luego, pudo realizar sus obras y también talleres en diferentes ciudades de Siria, Turquía, Grecia Palestina.

«Al frecuentar estos lugares he visto situaciones difíciles y hasta tristes, pero una cosa que me ha quedado es la dignidad en los ojos de estas personas. Es algo que me ha dado valor y que trataré de transmitir de alguna manera», dice Luvol. Y añade: «Con mi arte me gustaría sensibilizar a la gente, comunicando -a través de un juego, una sonrisa o una mirada que dibujo en los muros- que vale la pena luchar por la paz».

El 99% de los rostros que dibuja Luvol nacen de fotografías realizadas por él mismo, fruto de un encuentro y relación con personas. Como en el caso de Riham, una joven siria que, tras huir con su familia durante la guerra, se vio obligada a dejar la escuela para trabajar y ayudar a sus hermanos y hermanas (¡son 10 en total!). «Decidí representar a Riham en Belén, en el “muro de la vergüenza”, para todos los refugiados y los niños que se ven obligados a crecer cada día con abusos y crimines, frente a la indiferencia general», dice conmovido Luvol, refiriéndose al muro erigido por Israel desde 2002.

Aunque Oriente Medio es conocido por sus diversos conflictos, Luvol cree que la dificultad no es cuando llegas ahí, sino cuando vuelves a casa, porque en Medio Oriente encuentras mucha apertura, ayuda, hospitalidad y humanidad. «Cuando vuelves, lamentablemente existe el desconocimiento de la gente que no se da cuenta del dolor que otros, especialmente los niños, viven al otro lado del Mediterráneo. Cuando vuelves, ves que lo tienes todo y te quejas de nada. A veces, parece irreal escuchar y poder ver que las noticias que llegan están totalmente distorsionadas con respecto a la realidad», añade Luvol.

Luego de esta experiencia, nuestro joven artista sigue pensando en las etapas futuras del proyecto, con la certeza de que este es solo el primer gran capítulo de una larga historia, donde la pasión y el arte se encuentran para contagiar bondad y paz.

«Espero que en el futuro ya no haya necesidad de contar el dolor de los niños, que son el futuro de todos nosotros, porque nos encargaremos de cuidarlos como se debe hacer. ¡Eso es todo!» concluye.

Para obtener más información sobre el proyecto “Sons & Daughters” o sobre la compra de obras de Luvol, simplemente escriba a: projects@ohanaodv.com o visite el perfil de Instagram de Luvol: @federicoluvol.


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