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Primero de mayo en Loppiano 2024: el realismo de los jóvenes que trabajan por la paz
COMUNICATO STAMPA – COMUNICAZIONE LOPPIANO
Cientos de jóvenes en Loppiano (Figline e Incisa Valdarno – Florencia, Italia) en la jornada del 1° de mayo para descubrir calles, rostros, historias e iniciativas de quienes trabajan cada día para difundir la cultura de la paz en el mundo de la economía, la política, en asociaciones, investigaciones, arte.
La lluvia que cayó durante todo el día el 1°, Día del Trabajo, no impidió a los más de 600 jóvenes y sus acompañantes, que llegaran, desde varias partes de Italia, a Loppiano (Figline e Incisa Valdarno – Florencia), Ciudadela internacional del Movimiento de los Focolares, en ocasión de “Paths Towards Peace” (Caminos hacia la paz), la 52ª edición del Primero de Mayo de Loppiano. A ellos hay que sumar los 200 jóvenes involucrados en la organización de la jornada, de varias nacionalidades que, juntos dieron vida a una rica programación, compuesta por espacios de conocimiento, estudio y debate, con laboratorios artísticos y espectáculos.
El telón de fondo de la jornada fue el contexto de la crisis actual, con alrededor de 60 guerras vigentes en el mundo, desde Europa hasta África, desde Asia hasta América. «A veces nosotros jóvenes nos sentimos impotentes -explica Angela, de Mozambique, presentadora de la jornada junto con Francesco, italiano-. Pero aquí, hoy hemos tenido la oportunidad de detenernos, de reflexionar y de reflexionar juntos, sobre los caminos hacia la paz que queremos recorrer y que nos instan a hacerlo comenzando por nosotros mismos, nuestras ciudades, los contextos en los que vivimos».
Para la ocasión, el Auditorio de Loppiano se dividió simbólicamente en tres recintos temáticos qué, a través de laboratorios, experiencias, diálogos con expertos, ofrecían la oportunidad de escucharse a sí mismos, en “La paz interior”; al diálogo y escucha de los demás en “La paz con el otro” y a profundizar las grandes cuestiones de actualidad, que interrogan a los pueblos y los Estados, en el recinto titulado “La Paz en el mundo”.
En los diversos talleres y experiencias participaron profesores, expertos y animadores de algunos centros e iniciativas que, en ámbitos distintos, promovían una cultura de la paz y de la fraternidad militante, como : El Instituto Universitario Sophia (I.U.S.), el Polo Lionello Bonfanti, el Centro Internacional Studenti Giorgio La Pira, el proyecto educativo Living Peace International, l’Associazione Dancelab Armonia, los conjuntos internacionales Gen Verde y Gen Rosso, la ONG New Humanity, el United World Project.
Pero también los jóvenes del proyecto europeo “HeARTmony” -provenientes de Italia, España, Líbano, Bosnia, Egipto, Siria- que implementaron las metodologías aprendidas en los últimos meses para la inclusión social de inmigrantes y refugiados (a través de la música, la danza y el canto), en un taller de danza popular. Y los niños (13 – 17 años) del proyecto europeo “MediterraNEW”, nacido para contribuir a renovar la oferta formativa de las generaciones jóvenes, en particular, de los jóvenes de origen migratorio, a través de un enfoque multidisciplinario.
En los talleres propuestos, solo para nombrar algunos, “Agua fuente de paz”, en el que la profesora Daniela Ropelato, (Instituto Universitario Sophia) se analizó el drama de la destrucción de los recursos hídricos en los países en guerra, como Rusia, Ucrania o Tierra Santa. O, “Reconciliemos nuestras ciudades”, en el que el urbanista Peter Grudina guio a los participantes a descubrir los conflictos que se generan y crecen debido a espacios urbanos inadecuados, y qué se puede hacer, como simples ciudadanos, para contrarrestar estos fenómenos. Muy popular fue “Economía de paz”, el laboratorio promovido por el Polo Lionello Bonfanti junto con los jóvenes economistas y empresarios de “La Economía de Francisco”, promotores de una economía que pone a la persona al centro. El taller dedicado a las nuevas tecnologías y la inteligencia artificial impartido por el Prof. Andrea Galluzzi (Instituto Universitario Sophia) que guio a los jóvenes en una reflexión sobre el desarrollo del “yo” y del “nosotros” a través del caparazón tecnológico que hoy envuelve a cada individuo.
Luego, a las 13:00 horas, desde el escenario del Auditorio comenzó la transmisión en directo del espectáculo de apertura de la Semana Mundo Unido 2024, el evento mundial que, del 1° al 7 de mayo de cada año, cuenta con cientos de miles de personas involucradas en cada latitud para potenciar todas aquellas iniciativas culturales, sociales o deportivas que promuevan la unidad, la fraternidad y la paz entre las personas y los pueblos.
La transmisión en vivo fue inaugurada por Issa conectada desde Belen, quien pronunció su oración por la paz: «Ante la violencia, recordemos la oración de San Francisco y pidamos a Dios que nos haga instrumentos de paz, que estemos cerca de los débiles, de su sufrimiento, que nos ayude a no darles la espalda, a decir la verdad y a no tener miedo».
En el escenario de Loppiano, la historia de Gioia, una chica italiana que acaba de cumplir 18 años, que con valor reencontró la alegría de vivir, superando los miedos y los fantasmas que la habían llevado a la depresión. Después de ella, Mitko, de Bulgaria que, habiendo crecido solo, eligió el camino de la reconciliación con sus padres, en cambio de la indiferencia y el odio. O la historia de Marco, de Turín, que, con sus amigos (unos 60 jóvenes) distribuye comida a habitantes de calle, en los alrededores de las estaciones ferroviarias y en los parques de su ciudad. Para algunos de nosotros es una oportunidad para romper los estereotipos y prejuicios en relación con los habitantes de calle -explica-. Esto es posible solo cuando escuchas sus historias de sufrimiento y soledad. Para otros es una forma de salir de la propia zona de confort y ponerse al servicio de quienes están en dificultad». Agnes, médico ugandés, cuenta como gracias al proyecto Juntos por una Nueva África, pudo adquirir una nueva mentalidad, proponiéndose llegar a ser una agente de cambio positivo en su propio país. Así, además de ejercitar la profesión médica en un hospital en el norte de Uganda, hoy, inició un proyecto de plantación de árboles junto a jóvenes de su comunidad, promoviendo la protección del medio ambiente y el concepto de justicia climática.
En fin, mucha música y danza con rostro joven. Como el de los jóvenes que se encuentran en Loppiano para un período de formación a la fraternidad, y el de los bailarines de la Asociación DanceLab Armonía, promotores, en Montecatini, del “Festival Internacional “Armonía entre los pueblos”.
Entre las voces en el palco, estuvo la de Matteo Faustini, cantautor ganador del concurso de Area Sanremo en el 2019 y del premio Lunezia por el valor literario del texto en el Festival de Sanremo 2020 en la categoría debutantes.
«Esta mañana hemos hablado de una cultura de la guerra que nos arrastra a la negatividad y que a menudo nos hace cerrarnos al otro -especificó Francesco, el anfitrión italiano, al final del evento-. Y en cambio hoy, a través de nuestras historias y nuestro arte, quisimos ser testigos, de que una cultura de paz que no es de soñadores».